¿ Os acordáis de aquellos olores que salían de los viejos hornos cuando algun vecino hacía pan ?. A mi me cuesta muy poco recordarlo.
En cada casa que se preciara tenía que haber un carro, una pareja de vacas, un rebaño, (mayor o menor) de ovejas y cabras y un horno o forno.
La construcción de cada casa ya tenía previsto el horno, casi siempre en una pared que, en una esquina, tomaba la forma redonda en cuyo interior estaba el horno. Pero a veces era preciso apuntalar esta contrucción, poniéndole tejadillo propio y soporte específico en su parte baja.
Las fotos adjuntas, incluidas en viejas contrucciones que se están desmoronando, nos hacen revivir tiempos pasados que permitieron a nuestros padres, abuelos y antepasados sacar adelante unas familias horneando las hogazas de centeno.
Ya sabéis que, para ver en todos sus detalles las fotos, solamente es preciso dar un clic en cada una de ellas. Si tenéis una pantalla panorámica de 17 pulgadas en adelante la imagen será espectacular.
No hay comentarios:
Publicar un comentario